miércoles, 10 de octubre de 2007

Payasos, cosas que dan miedo

El miedo a algo, es capaz de producir una emoción tan grande que a veces se puede confundir con el placer. Eso me ha ocurrido.


Una vez pregunté:
-¿hay algo que le daria mas miedo a usted que encontrarse por la noche con un payaso?
- Si señor, encontrarme con dos!!! me respondio alguien riendose.
- Y yo dije: no!!! mas miedo me daria encontrarme solo con medio!!

Desde hace muchos años no he soportado la imagen de un payaso cerca de mí.
De pequeño, mi padre ponía un disco de una ópera que se llama "El payaso", y me contaba que era la historia de un payaso que su mujer le era infiel, él se entera, y en medio de una actuación en el circo, saca un cuchillo y la mata". Nunca se me olvidará.
Para mi sorpresa, el otro día viendo un anuncio de detergente Micolor, que habré visto mil veces en mil versiones distintas, me di cuenta que algo tan maravillosamente esperpéntico estaba ahí, para disfrutar, aunque sea sintiendo miedo.
Desde entonces, sumo la imagen del payaso en mi larga lista de cosas a coleccionar y como buen coleccionista y acumulador Diogenario, busco por ebay y por todas partes todo tipo de payasadas.

Os dejo con una parte de la ópera.

"El payaso está agotado y estupefacto:
¿Actuar? ¡Ahora que deliro tanto que no sé lo que hago! (Se mira en el espejo del armario). ¿Piensas que eres un hombre? ¡No eres más que un payaso!

Ponte el disfraz y maquíllate la cara. La gente paga para reírse, así que si Arlecchino te roba a Columbina, ¡ríete, payaso, y todos aplaudirán! Convierte tu dolor y tu angustia en bromas, pon cara de guasa en lugar de lágrimas y sufrimiento. ¡Ríe, payaso, de tu amor arruinado! ¡Ríe del dolor que envenena tu corazón!

Entra sollozando en el teatro, y el telón cae lentamente."

P.d.: ¿no nos darán miedo porque más de una vez nos hemos sentido como un payaso?
¡RIE DEL DOLOR QUE ENVENENA TU CORAZÓN!




Mi última adquisición.
Payaso de playmobil de 1974.

2 comentarios:

Guille Mostaza dijo...

Michiiiii.
Sí dan miedito los clown, sí.

nuria ruiz de viñaspre dijo...

La enfermedad nos amputa y el miedo nos paraliza y tiraniza nuestros músculos limitando el movimiento, la libertad. Se asienta en nuestras piernas frías y va entrando en nosotros con la existencia de lo terrible y lo desconocido en cada partícula del aire. ¿Pero acaso no nos atrae siempre lo desconocido? Pues esa misma emoción que nos produce el miedo es la que devuelve la vida a nuestras venas. Hoy vives, conjuras y presientes… Ya ves, todos tenemos miedo a algo, no podríamos vivir sin él. Pero lo hermoso es que siempre está su antagonista, disfrazado de aquello que le gana siempre la batalla. Yo, por ejemplo, por miedo a hablar, me dejo escribir y en la oblicuidad del arie se esconde ese payaso mío particular.
En cuanto a los payasos, a mí me resultan inquietantes y una de las definiciones menos negativas de esa palabra es "Propenso a promover o efectuar cambios", eso sería ver el vaso medio lleno, y sino que se lo digan a los niños que se ríen tanto con ellos a pesar de sacrificar noches enteras llenas de inquietantes sueños.

Ah, Mi vida en Sofía, ¿te gusta el título?